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El arte es comparable a la cocina,"cualquiera puede cocinar", pero no significa que cualquiera pueda ser un gran artista, si no que los grandes artistas pueden proceder de cualquier parte.
Nadie desconoce que la civilizaciones y culturas más antiguas han desarrollado formas de cocina muy diferentes y dispares, así como complicadas, complejas y muy deliciosas.
En la actualidad, la cocina a través de los diferentes medios de comunicación se ha convertido en una herramienta que puede ser utilizada en diferentes campos.
La cocina sin duda es un lugar de sabores, de sustancias, de suspiros y grandes secretos. Pero también de sorpresas, de colores y recuerdos. Es un laboratorio, un refugio, es un sitio de creación.
Hoy en día, la cocina se ha trasladado al aula educativa en forma de talleres. Los talleres de cocina en la escuela no son únicamente un tiempo durante
el cual se enseñan técnicas culinarias y estrategias para una
alimentación saludable, sino un espacio educativo que permite aprender
todos los aspectos sociales y culturales que acompañan al acto de comer.
Las posibilidades creativas son infinitas, y se pueden adaptar a las diferentes edades y nivel de dificultad. La cocina es una herramienta fácil y sencilla donde dejar libre nuestra imaginación y poder llegar a ser creativos de una forma diferente.
En cuanto a la ventaja pedagógica de hacerlo no puede ser más clara y
contundente pues con ello se trabajan capacidades de todo tipo que hacen
que sea una forma extraordinaria de aprender para la vida y, lo que es mejor, se aprende matemáticas, ciencias naturales, autonomía personal, se aprende a mantener hábitos
de orden y limpieza, coordinación
oculo-manual, lecto-escritura (la recetas se leen y se escriben para
llevarlas a casa, se hacen notas para recopilar los ingredientes…), se
aprende a trabajar en equipo, se estima la importancia de la
colaboración, se fomenta la sociabilidad, se aprende a valorar lo que otros hacen, se
desarrolla el gusto por la estética y se fomenta la expresión plástica a través de creaciones motivadoras e innovadoras para los niños, ya que quizás no había experimentado los talleres de cocina creativos. Por esto y por muchas razones más creo que los talleres de cocina en la escuela son una forma innovadora de fomentar y apoyar la creación, imaginación, habilidades y capacidades artísticas de nuestros alumnos.
A continuación, os muestro diferentes obras de arte realizadas a través de la cocina.
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| Ilustraciones de Alex Solis |
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